domingo, 14 de septiembre de 2008

París

París es una ciudad única. Es amor, es magia, es elegancia, es belleza…
Allí casi nada te deja indiferente, todo impresiona y enamora. Parece que nada se construyó al azar, que todo sigue un patrón de absoluta perfección, pensado para embargarte en cada calle, en cada esquina. Si amas, allí amas más…
En París estás en casa, paseas sobre tus recuerdos, todo es familiar porque todo lo conoces de una u otra manera.
Sientes que caminas en una película, te encuentras sin cesar formando parte de escenarios conocidos. Recorres sus museos y pareces recorrer las páginas de tus libros del colegio.
Te marchas pensando que te gustaría volver algún día, pero volver no sólo para visitar la ciudad, sino para formar parte de ella, ser tú misma París. Pintar en alguna calle del barrio de Montmatre, beber vino a orillas del Sena, besarte bajo la torre Eiffel, cenar en Maxim’s…

Pero no estés triste mi querida Madrid, tú eres la primera en mi corazón, ya lo sabes... He vuelto a ti como antes, pero algo distinta, ahora podré decir aquello de “Siempre nos quedará París”…

1 comentario:

Miriam dijo...

¡Qué bonitoooooo!

Me ha gustado mucho tu entrada en el blog, haces muy buena publicidad de Paris...jejeje. No ya en serio, me parece que tienes razón, debe de ser una ciudad increíble y mágica en la cual todo te debe de deslumbrar, y en la que debes de quedar fascinado a cada paso que des...

Aparte debe de ser impresionante recorrer esos jardines de Versalles, o esos campos Elíseos, o simplemente pasear por los alrededores de unos de los grandes Museos del mundo "el Louvre".....

Bueno, la verdad es que yo espero poder recorrer también esos lugares extraordinarios…


Miriam